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Mostrando entradas de marzo, 2017

La Escuelita del horror

Por Sofía Romera Zanoli para El Diario del Juicio "Recorrieron el sitio donde estuvieron secuestrados durante el Operativo Independencia"  El Tribunal Oral Federal (TOF)   llevó adelante una inspección ocular en “La Escuelita de Famaillá” que funcionó como primer centro clandestino de detención del país identificado por la Conadep, para que los testigos sobrevivientes   pudieran reconocer el lugar donde estuvieron secuestrados y fueron torturados durante el Operativo Independencia.  Ph Sofia Romera Zanoli Miguel Martínez, uno de los testigos víctimas fue secuestrado el 11 de marzo de 1975 por un grupo de militares y permaneció alrededor de 40 días en cautiverio en La Escuelita, “me ingresaron por el portón que está en la parte de atrás y luego me llevaron a un aula (que aún se encuentran en el lugar) donde el fotógrafo me sacó una foto”. Luego Martínez recordó que lo llevaron a un sector de la galería, donde le   sacaron la venda para hacer que reconoz

Por la Memoria, la Verdad y la Justicia

Por Fabiana Cruz para El Diario del Juicio Roberto Heriberto Albornoz está acusado como: “autor material de delitos cometidos en perjuicio de 35 víctimas, como autor mediato por 174 casos de violación de domicilio, 230 casos de privación ilegítima de la libertad con apremio y/o vejaciones, 220 casos de aplicación agravada de torturas y 129 casos de homicidios triplemente agravados. Deberá responder, además, como partícipe necesario de delitos sexuales en perjuicio de 16 víctimas”. El día viernes 17 de marzo se escucharon los relatos en el TOF (Tribunal Oral Federal) de diferentes casos en los que se encuentra directamente implicado Albornoz, quien se encuentra bajo prisión domiciliaria. Por videoconferencia, se escuchó la voz de Benigno Alberto Pereyra desde la provincia de Tierra del Fuego, un hombre que hoy tiene 60 años y es empleado público. Él y su tío Ángel Oscar Villavicencio fueron secuestrados durante el Operativo independencia en el año 1975 en la provincia

Relato 350

Por Hugo Hernán Díaz para El Diario del Juicio Mario Ernesto Medina tiene 65 años, ingresa rápidamente a la sala principal del Tribunal Oral Federal de Tucumán y tras algunos inconvenientes con el micrófono comienza a declarar. El C.P.N. recuerda haber iniciado el servicio militar obligatorio un 2 de febrero de 1976. El mismo tuvo lugar en el Comando de la V Brigada de Infantería y sus tareas eran generalmente las de limpiar pisos y baños. Junto a él iniciaron el servicio militar un grupo de 90 profesionales (contadores, biólogos, abogados, etc.) entre los que se encontraban Raúl Topa, Alberto Nova, Jorge Jiménez, Raúl Fiori, Oscar Castillo, entre otros. Estos conscriptos presentaban una particularidad, por las noches eran enviados a dormir a sus hogares. Fue un 24 de marzo de 1976 cuando curiosamente les habían pedido que se queden despiertos. En esa madrugada se inició el golpe.  Aproximadamente a las 4:30 de la mañana el teniente coronel, Mario Albino Zimmerman, Jefe de la

Inspecciones oculares – Policía Federal y Hospital Militar.

Por Fabiana Cruz y Hugo Hernán Díaz para E l Diario del Juicio. A media mañana y bajo una llovizna intensa el tribunal a cargo del Juez Gabriel Casas se constituyó en primera instancia en calles Santa Fe y Maipú (sede de la Policía Federal). Allí aguardaba Lilian Reynaga, quien estuvo prisionera en aquella institución entre el 22 y el 26 de julio de 1975, trasladada posteriormente al “Buen Pastor”. La mujer ya había exigido en oportunidades anteriores que se tome en cuenta la labor de la PF, funcional al Operativo Independencia. “¿Por qué la Policía Federal quedaba tan tapada? Acá torturaron muchísima gente, y entro esos muchos estuve yo”. Ya dentro del lugar Lilian recorrió y reconoció los espacios (celdas, habitaciones, escaleras, oficinas) donde fue torturada y a pesar de lo fuerte del momento lo consideró necesario; una reivindicación que tenía que darse. Si bien el edificio sufrió muchos cambios en la infraestructura aún queda el olor de la injusticia, el dolor y la sang

Reconstruyeron el circuito del horror

Por Sofia Romera Zanoli para El Diario del Juicio Testigos sobrevivientes,  jueces, abogados y psicólogos recorrieron los  distintos centros clandestinos de detención y bases militares del sur tucumano que formaron parte del circuito represivo, de las fuerzas armadas, que funcionó en Tucumán  durante febrero del 75 hasta el golpe de Estado del 24 de marzo del 76. Caspinchango, la Comisaría y la Escuela Lavalle de Famaillá, Ingenio La Forterita y  el de Santa Lucía, fuero los lugares visitados como parte del proceso judicial denominado Operativo Independencia en el que se juzga a 19 ex miembros de las fuerzas armadas por la comisión de  crímenes de lesa humanidad.  “Es importante que el tribunal se constituya en el territorio donde ocurrieron la mayoría de los hechos que se investigan en este debate, que muestra a la ciudad de Famaillá como centro de operaciones de las fuerzas armadas durante el Operativo Independencia”, explicó la Fiscal Ad Oh Julia Vitar “Pudim

Entre pequeños sirvientes y helicópteros fantasmas.

Por Fabiana Cruz y Hugo Hernán Díaz para El Diario del Juicio Ph  Elena Nicolay En una escuelita que todavía no había sido inaugurada, un muchachito de apenas unos 14 años aguardaba que un grupo de militares le recibieran la comida que su madre les había preparado. Mientras tanto, escuchaba gritos desgarradores que provenían del jardín de infantes. El jovencito sabía que allí tenían lugar torturas y hostigamientos; sabía también, que cuatro aulas del lugar eran destinadas a ser "salas de detención" . Los había visto. Había contemplado a las personas que padecían en esas aulas, estaban todos igualmente sucios y deteriorados, atados de manos y pies. Cuando la espera terminaba y los militares finalmente se le acercaban, era incapaz de mirarlos a los ojos. “Un tal Raúl era el más malo”. Incluso algunos miembros del ejército bromeaban con que el tamaño de las manos de este hombre no se correspondía con el daño que producían. Después de que le recibían la comida, el much

“Terrorista muerto por patrulla militar”

Por Fabiana Cruz y Hugo Hernán Díaz para El Diario del Juicio Con ese título fatal el diario tucumano “La Gaceta”, daba a conocer en su primera página la muerte de José Desiderio Medina Gramajo, y otro vecino de la ciudad de Monteagudo, un 27 de abril de 1975, en la provincia de Tucumán. La noticia, traía consigo la fotografía del cadáver del hombre tumbado en el suelo, donde se señalaba lo siguiente: “ Cadáver del guerrillero José D. Medina Gramajo muerto durante un enfrentamiento con una patrulla militar en la zona de operaciones del Ejército”. Además en el cuerpo de la información, se explicaba lo siguiente: “En circunstancias que efectivos del Ejército se encontraban cumpliendo una misión de patrullaje durante la noche del 25 al 26 de abril en la zona serrana, sorprendieron a un individuo en actitud sospechosa, que sin mediar orden de arresto ni intimación abrió fuego sorpresivamente con un revólver que extrajo de sus ropas, los efectivos militares respondieron al fuego dand

El maestro de pueblo

Por Exequiel Arias para El Diario del Juicio Archivo H.I.J.O.S. Tucumán Lorenzo Nolasco Medina relató al Tribunal que en el año 1975 vivía en Buena Vista (Simoca) junto a su padre, madre y ocho hermanos. Pedro Antonio Medina era el mayor, trabajaba como maestro y se había casado con Ana María Mrad unos días antes de su secuestro. “La última vez que lo vi fue el 30 de enero” dijo el testigo. Según la declaración, Pedro se encontraba en Simoca, sobre la ruta 157, y se dirigía a la ciudad de San Miguel para visitar a su suegro. Vecinos del lugar le comentaron a la familia que vieron por última vez a Pedro cuando subió a una camioneta rastrojera, frente al cementerio de la zona. Lorenzo contó que no recordaba si su hermano tenía actividad política. Sin embargo, según consta en un expediente de la causa “Operativo Independencia” (401015/2004), Pedro Antonio militaba en Montoneros. De acuerdo al mencionado expediente, el 9 de febrero de 1975 dos vehículos particulares intercepta

Una militante

Por Inés Lugones para El Diario del Juicio   “Estaría traicionando la memoria de mi hermana si no dijera que era una persona  política y profundamente comprometida con su tiempo, la política era su vida…”, éstas fueron las palabras de Mercedes González el 23 de febrero pasado en el juicio del Operativo Independencia que se realiza en Tucumán. Mercedes prestó testimonio por el caso que investiga los hechos de los que fuera víctima su hermana Olga Cristina González, militante del PRT. Dio un relato pormenorizado de su secuestro y desaparición y de las múltiples gestiones realizadas por la familia para saber el destino de Olga Cristina. Mercedes rindió tributo a su hermana como ella hubiera deseado lo hagan, dando cuenta de su pertenencia política y su compromiso  militante  por la cual la asesinaron. HASTA LA VICTORIA SIEMPRE! MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA

El terror en el que andamos

Por Exequiel Arias para El Diario del Juicio - “¿Jura usted por sus creencias decir verdad de lo que supiere y le fuera preguntado?” - “Juro por la memoria de mi hermana. No tengo una creencia particular.” Ph Elena Nicolay Con esa respuesta, Mercedes Beatri z González dio inicio a su declaración en la que le relató al Juez Casas y el resto del tribunal, todo lo que sabía sobre la desaparición de su hermana, Olga Cristina González. La testigo contó que, hacia el año 1975, vivía en Tafí Viejo junto a su madre, su padre y dos hermanos, Germán (h) y María del Carmen. Por su parte, Olga Cristina se había mudado en el año ‘73 a San Miguel de Tucumán y vivía en un departamento que compartía con Maurice Jeger. Estudiaba la carrera de psicología y trabajaba en la librería de compañero. Su hermana la describió como una persona "muy humana y de profundas convicciones políticas". De hecho, relató que la pareja militaba en el PRT desde hacía varios años. La relación de Olga

El negacionismo y sus variantes

Por Tina Gardella para El Diario del Juicio Como las olas. Van y vienen. Como las olas. Así son los intentos por negar y ocultar  los crímenes cometidos por el terrorismo de estado. No se trata de los imputados que están siendo juzgados en los juicios de lesa humanidad, muchos de los cuales desarrollan cuidadosos y puntillosos descargos sin nada nuevo por agregar a las causas. Sino del poder político representado por quienes ejercen funciones gubernamentales,  como así  también por actores socio-culturales-políticos  que manifiestan, en el mejor de los casos, desconocimiento cabal del proceso de construcción de memoria, verdad y justicia y desconocimiento de la gravedad ideológica de la actual coyuntura neo liberal en nuestro país. El “negacionismo” como se conoce a la tendencia a negar los crímenes cometidos por el terrorismo de estado y que surgiera en virtud de negar los crímenes del nazismo contra los judíos, adquiere formas diversas que van desde negar el número de los 30 mi